La grappa es un aguardiente italiano que se obtiene destilando el orujo de uva (pieles, semillas, tallos) tras la vinificación. Se diferencia de otros destilados de uva por ser específicamente de los restos sólidos. Tiene un sabor fuerte y característico, ideal como digestivo o para dar un toque intenso y aromático a cócteles que busquen un perfil vinílico robusto.