Tequila

El tequila es un destilado de agave azul, originario de Jalisco, México. Se obtiene fermentando y destilando el jugo del agave. A diferencia del mezcal, solo usa agave azul. Es la bebida más representativa de México y un básico en coctelería para tragos icónicos como Margaritas, Tequila Sunrise o Palomas.

Ingredientes derivados:

Tequila añejo

Tequila 100% de agave azul, envejecido en barricas de roble entre 1 y 3 años. Esto le da un color ámbar y notas más suaves y complejas que un tequila blanco o reposado, con toques a caramelo, vainilla y especias. Se usa en coctelería para dar profundidad y sofisticación.

Tequila extra añejo

El tequila extra añejo es un destilado 100% de agave azul, madurado en barricas de roble por más de tres años. Esta larga crianza le da un color oscuro, aromas complejos de vainilla, caramelo y especias, y un sabor muy suave y profundo. Se diferencia de otros tequilas por su mayor tiempo de envejecimiento. Se usa principalmente para beber solo, saboreándolo como un buen whisky, o en cócteles sofisticados donde su complejidad pueda brillar.

Tequila oro

El tequila oro (o joven) es una mezcla de tequila blanco con tequila añejo o extra añejo, a veces con caramelo para dar color. Es más suave que el blanco y perfecto para chupitos.

Tequila plata

El tequila plata, también conocido como tequila blanco, es el más puro y joven de los tequilas. Se embotella justo después de su destilación o con un breve reposo en acero inoxidable siempre inferior a dos meses, lo que le confiere un perfil fresco, con notas herbáceas, cítricas y a veces picantes de agave.

Tequila reposado

Este tequila, 100% de agave azul, se madura en barricas de roble entre 2 y 12 meses. Esta crianza le da un color dorado y un sabor más suave y complejo, con notas a vainilla, caramelo o especias, a diferencia del tequila blanco.